Siempre resulta poético ver videos que nos dan ese impulso temporal de alabanza y agradecimiento y que nos impulsa a tener durante unos cuantos minutos buenas intenciones de ir y ser parte de todo ese movimiento evangelístico que recorre el mundo pero, para desgracia de nuestro ánimo ... enseguida preferimos volver a nuestro cotidiano movimiento evangélico; ese de a veces hablo de Jesús con extraños y a veces voy obligado a evangelizar aunque me escondo detrás de todos para nos ser yo quien hable, pero la realidad del evangélio es que debemos hablar a todos. No es cuestión de cruzarse el mundo, Dios no te llamó para eso o ya estarías haciendo maletas, es evidente que los misioneros a otros paises no van a estar leyendo esto o entretenidos en facebook o bajandose videos de youtube. Este mensaje va para ti que eres como yo, para que nos pongamos en serio, para que ese impulso momentaneo sea perpetuo y para que ayudemos a esos misioneros que cerca o lejos llevan la palabra de Dios. Podemos orar, podemos declarar, podemos ayunar, podemos alabar ... podemos hacer mucho por nuestros hermanos lejanos y por los cercanos también, hay iglesias que precisan ayuda, hay anexos que se mueren por falta de apoyo, hay niños que no conocen de Dios en nuestro propio barrio.

 

Dios tal vez no te llamo a cruzar fronteras pero si te llamó para atravesar el dintel de tu casa y llevar su palabra.